La cena secreta de Javier Sierra
Reseña
El padre Agustín Leyre, un dominico experto en descifrar acertijos es
enviado desde Roma a Milán, más precisamente a la iglesia Santa María delle
Grazie, donde el maestro Leonardo Da Vinci está pintando su muro La última cena
para descifrar mensajes cifrados que atentan contra el Vaticano. Una serie de mensajes anónimos sugieren que
existe una confabulación en la que el pintor y el Moro, duque de Lombardía,
forman parte para desacreditar a la Iglesia de Roma. El fray Leyre, en su calidad de inquisidor,
tendrá la misión de descubrir la verdad.
Comentario
Al comenzar esta novela y después de leer varias críticas, recordé el
concepto de Umberto Eco sobre la relación autor-lector cuanta más compenetración hay entre ambos, cuanto más cerca la
competencia del lector está del autor, más accesible y directa será la
comprensión de la lectura. En esta
obra, la intriga para muchos lectores se desvanece, pierde su fuerza ante
tantos nombres de personajes, topónimos, citas en latín y así la trama se torna
más densa y el ritmo más lento.
El padre Leyre, narrador en primera persona, junto al pintor Da Vinci
son los personajes más destacados, el primero por ser el protagonista y el
segundo por el interés que obviamente despierta su caracterización física y
psicológica.
A diferencia de Dan Brown que da preferencia a la acción y el ritmo
vertiginoso, la prosa de Javier Sierra se decanta en la erudición y en un
estilo propio de la época.
La cena secreta es una experiencia lectora digna de un público
familiarizado con la intrincada y oscura época prerrenacentista.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario