Casi una mujer es el título
original de esta interesante novela
Reseña
La historia de Cristina de
Suecia comienza el mismo día de su nacimiento cuando por su robusta
constitución y su llanto poderoso, las damas de la corte la confundieron con un
varón.
A los seis años pierde a su
padre por el que profesaba una profunda admiración. Gustavo Adolfo II la educó
como si fuese un niño y, a diferencia de su esposa, le brindó amor y
protección.
Después de la muerte de su
padre, Cristina se abocó a los estudios; era una niña curiosa y ávida de saber.
Sin embargo, odiaba las actividades protocolares y la opresión que sobre ella
ejercía su regente. Recién veinte años después, alcanzó la plenitud del poder
real.
Después de tantos años de
sometimiento, demostró abiertamente su deseo de hacer de Suecia un centro
humanístico y se rodeo de sabios y artistas. En poco tiempo demostró sus
inclinaciones sexuales, su deseo de conversión al catolicismo y la necesidad de
alejarse de Suecia. Dos años después, de alcanzar el trono, abdicó en favor de
su primo y partió hacia Roma, donde sentó las bases de lo que después sería la
Academia de la Arcadia.
Comentario
Dario Fo realizó una
investigación exhaustiva sobre la biografía de esta fémina tan peculiar y con
su estilo tan particular elaboró esta interesante novela biográfica. Una historia que se
centra principalmente en el profundo amor de Cristina por el teatro y en el
valioso legado artístico que dejó en Italia. Más allá de su rebeldía y
ambigüedad, Fo la destacó como una verdadera mecenas de las artes.
Valoración 
Cristina, reina de Suecia, una figura desbordante para su época
En los albores del cine, Greta
Garbo personificó a Cristina de Suecia. Sin embargo, su figura no se
correspondía con esta reina. La actriz era alta, delgada y bonita, mientras que
la reina era baja, fornida, defectuosa y fea.
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