Memorias de una geisha de Arthur Golden
Reseña
Sayuri, poco antes de
morir, cuenta cómo pasó de ser una niña pobre, llamada
Chiyo, que vivía en un pueblo perdido de la costa nipona, a una de las más famosas geisha de Japón.
Cuando su madre muere, Chiyo es vendida por su propio padre junto con su
hermana, pero la peculiaridad del color de sus ojos hace que la elijan sólo a
ella para iniciar su capacitación como geisha. Una pequeña Okya, en el distrito
de Gión (Kioto), será su nuevo hogar, y, a pesar de que su vida allí estará
llena de tribulaciones y desconciertos, Chiyo se transformará en Sayuri y se
abrirá camino para alcanzar lo que más ansía en la vida: el amor del Presidente.
Comentario
Memorias de una geisha es una
deliciosa novela que parece ser escrita por la pluma de una mujer, ya que su
autor ha sabido captar, con una prosa tan sutil como exquisita, la esencia femenina
en la voz de su narradora. Escrita en primera persona, Chiyo/Sayuri nos relata
con frescura y espontaneidad todos los pormenores por los que va a travesando
desde que es arrancada de su hogar.
La trama descriptiva predomina
sobre el hilo narrativo, pero no por ello pierde ritmo el relato. Muy por el
contrario, resulta de lo más pintoresco ver pasar de una detallada y colorida
descripción de un kimono a los caricaturescos retratos de algunos personajes
que son conocidos por sus despectivos y humorísticos motes, tal son los casos
de Calabaza y el señor Lagarto.
Por otra parte, el hilo
argumentativo está poblado de toques costumbristas acerca de la vida de las
geishas y su inserción en la sociedad de la época. Una verdadera estampa
cargada de rituales, costumbres y normas a las que no sólo las geishas, sino
también los hombres que las frecuentaban deben tener presente. Entre ellas, el
famoso ritual del té. La
protagonista es una criatura que, a pesar de los años transcurridos, no pierde esa
chispa de empatía hacia el lector y esos
toques de humor tan oportunos. En cuanto a los demás, personajes están muy bien
caracterizados, ninguno se manifiesta como simple estereotipo.
Memorias de una geisha se
perfila como una novela biográfica y una magnífica estampa costumbrista de un
Japón de entre guerras, no ajeno a las crisis del treinta, pero que conserva en
ciertos sectores de su sociedad, los extravagantes despliegues y rituales del
mundo de las geishas a los que no están dispuestos a renunciar.
La novela es llevada al cine
en el 2005 bajo la producción de Steven Spielberg con la que obtiene el Premio de la Academia y
del Grammy. Aunque la experiencia lectora, en mi opinión, sigue siendo más
gratificante, los paisajes de Kioto y aquellos escenarios por donde transita
Sayuri son dignos de apreciar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario