En la época de los grandes
descubrimientos, llegó a la corte francesa de Enrique ll y Catalina de Medici,
Petrus Gonsalvus, un nativo de Tenerife, cuyo cuerpo estaba cubiero de un
pelaje pajizo. La enfermedad, no registrada hasta el momento, se la conoció
como el síndrome del hombre lobo.
Poco se sabe de los primeros años de Petrus en
la isla, salvo que había sido rechazado por sus padres y recogido por los
monjes de un monasterio. A los diez años, embarcado en un barco corsario, parte
como mercancía exótica hacia el continente.
Su llegada a la corte del rey
Enrique II fue bendecida con el beneplácito del monarca, que lo convirtió en un
gentilhombre, y lo casó más tarde con Catherine, una joven protegida de la
reina.
Sin embargo, pasaron siete
años y un derrotero de aventuras y sin sabores, para que Petrus, recién fuese
aceptado en cuerpo y alma por su bella esposa. A partir de ese momento, nadie
los separó y bajo la protección de la reina se asentaron en tierras italianas y
formaron una gran familia con siete hijos, de los cuales cinco heredaron la
enfermedad que más tarde se conoció con el nombre de hipertricosis o síndrome de
Ambras.
La historia de Petrus
Gonsalvus inspiró distintas versiones de la Bella y la bestia, siendo, en el cine, la
más popular la de Walt Disney
Muy interesante!
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